Los mundos imaginarios de Cervantes (2.ª parte)
Decíamos que Cervantes no fue buen crítico de sí mismo. Es decir, pensaba que los ideales literarios renacentistas en los que había creído seguían vigentes aún en la España que encontró a la vuelta de sus hazañas bélicas y su largo cautiverio. Solo que para entonces había pasado ya una generación, y los gustos habían …