Convalecencias

No es raro ver cómo algunos escritores escriben obras durante su convalecencia. Por poner tan sólo un par de ejemplos, Kafka escribió parte de su obra durante largos períodos de enfermedad y Camilo José Cela escribió Pabellón de reposo durante su retiro en un sanatorio antituberculoso.

Juan Gracia Armendáriz es escritor, columnista y además de eso, es un profesor universitario que para algunos de los que hemos podido ser destinatarios de su actividad docente, constituye uno de esos casos excepcionales que tienen la capacidad de salvar cursos enteros rellenos de créditos de dudoso contenido o de eclipsar a malos profesores para que queden relegados al siempre agradecido olvido.

Este autor, que en 2008 hablaba desde la tribuna del suplemento Babelia sobre la capacidad terapéutica que puede ejercer la literatura sobre el lector enfermo,  aparece hoy en las páginas de Público en el lado contrario, como un escritor que exprime la experiencia hospitalaria y escribe a la luz de una máquina de diálisis su obra Diario del hombre pálido.

Para los que hemos sido alumnos, leer esas entrevistasen las que Gracia Armendáriz deja de ser el enigmático profesor que recordamos para adentrarse en los terrenos de lo creativo y lo personal, supone una gratificante vuelta a ciertos recuerdos universarios y una inmersión en el infinito saber literario.

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2 comentarios en «Convalecencias»

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